miércoles, 4 de noviembre de 2015

¿Otra historia?

Pensaréis ¿otra historia? ¡Pues claro! Como ya hemos contado una historia de un caballo, ahora le toca al perro ¿no? Bueno espero que os guste.
Se titula ¿qué pasó?

                                                              ¿Qué pasó?
Era se una vez una familia llamada La familia Clow.
Ese día ¡era Navidad! Entonces se entregaron los regalos, Jacob era el único hijo por eso sus padres decidieron regálale un perro
-Hijo habré el regalo grande azul-dijo su madre contenta
A Jacob le dio igual y siguió con los juguetes, cuando lo abrió y vio una cachorrita de pura raza le dio igual. Sus padres muy triste le dijeron
-Mira hijo será tu perrita se llama Greta-dijo su madre
-Hijo es una perra de concurso es de raza pastor suizo blanco-dijo su padre.
Pero Jacob siguió jugando y sus padre no tuvieron más remedo que abandonar a Greta en un parque.
A las 3 horas una chica llamada Laura Johnson se la encontró y como se notaba que estaba hambrienta  y encima estaba empezando a llover, así que se la llevó a su casa.
Cuando llegó a toda su familia le gusto así que la cachorrita tuvo suerte pero no sabían su nombre, pero dio la casualidad que venía una carta con lo ocurrido:

Hola si estás leyendo esto es que eres buena persona por qué has adoptado lo que nuestro hijo Jacob no supo.
Se llama Greta, es una perra de concurso de pura raza pastora suiza blanca. Es muy obediente y no ladra nada y por favor cuidadla bien.

Un beso la familia Clow.


Unos años después, tal como decía la carta Greta se hizo la mejor perra de concurso del año, a lo largo de los 5 años gano 17 concursos y vivió feliz con su verdadera dueña.


En la historia dice que su verdadera dueña era Laura, tiene razón, ella supo apreciar a Greta.


Esta es Greta.







     
                                          

                                                                         





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